El acoso laboral es un problema más frecuente de lo que se deja ver en muchas ocasiones. No obstante, ganar un juicio por acoso laboral puede ser algo complejo. El principal problema de ello suele tener que ver con la falta de pruebas, debido a que, muchas veces, los jueces pueden negarse a aceptar mensajes electrónicos u otras pruebas que consideren poco contundentes, a la vez que puede ser complejo lograr que los compañeros de trabajo se animen a testificar.
Pese a ello, a continuación, vamos a hablar de las claves a tener en cuenta para ganar un juicio por acoso laboral y recibir la compensación que se merece en estos casos.
El paso previo al juicio por acoso laboral: la denuncia ante la inspección de trabajo
El primer paso que se debe seguir en caso de enfrentar acoso laboral, es hacer la correspondiente denuncia ante la inspección de trabajo. Si bien esto no es un requisito en todos los casos, lo cierto es que sí ayuda a dilucidar mejor los hechos.
Esto último se debe a que, de esta forma, se accede a un inspector. Si el inspector constata que existe acoso laboral, puede interponer una sanción económica para la empresa. A partir de este punto, se elabora un expediente administrativo de acoso laboral. Este expediente, por su parte, funciona como prueba para demostrar posteriormente en el Juzgado que existe una situación de acoso laboral o mobbing.
Si bien es cierto que es en realidad el Juez el que, después, determina si efectivamente hay o no acoso laboral, la realidad es que el expediente por inspector puede ser una prueba contundente, mucho más que otras que se pueda llegar a obtener.
“Si el inspector constata que existe acoso laboral, puede interponer una sanción económica para la empresa. A partir de este punto, se elabora un expediente administrativo de acoso laboral. Este expediente, por su parte, funciona como prueba para demostrar posteriormente en el Juzgado que existe una situación de acoso laboral o mobbing”.
¿En qué casos se puede hablar de acoso laboral?
Si lo que se quiere es poder tener la posibilidad de ganar un juicio de acoso laboral o mobbing, es muy importante comprender previamente cuáles son los casos en los que hay acoso laboral. En este sentido, podemos decir que son:
- Cuando es sistemático y prolongado en el tiempo: no se puede hacer referencia a acoso laboral en los casos en los que la situación haya ocurrido una sola vez o de forma muy esporádica.
- Cuando haya comportamientos hostiles: si el trabajador o trabajadora sufre de expresiones de desprecio, enfados injustificados, gritos, malos tratos, entre otras cosas.
- Cuando hay un causante: es importante que se pueda identificar quién o quiénes son las personas que están ejerciendo el acoso laboral. El denunciante debe poder determinar si son sus superiores, sus compañeros, terceros y quién en particular.
La demanda: ¿cómo iniciar el juicio por acoso laboral?
Si bien es cierto que puede ser de gran utilidad como prueba, lo que hay que tener en cuenta es que, para poder acceder a la vía judicial por acoso laboral, no es necesario el paso previo de la Inspección de Trabajo. La inspección funciona como prueba y contribuye a obtener una sentencia favorable si el inspector ha constatado que existe dicho acoso, por lo que puede ser altamente conveniente. No obstante, no en todos los casos se prefiere seguir este paso.
De cualquier manera, tanto si se va directamente con el Juez como si se realiza la inspección, las pruebas que habrá que presentar son:
- Correos electrónicos o mensajes en los que se observe el acoso.
- Testigos.
- Expediente administrativo (en los casos en los que se haya solicitado la inspección).
- Conversaciones o llamadas grabadas en las que el afectado haya participado y que den cuenta del acoso laboral.
- Informes médicos (en los casos en los que la salud del trabajador o trabajadora se haya visto afectada por la situación).
“No es necesario el paso previo de la Inspección de Trabajo. La inspección funciona como prueba y contribuye a obtener una sentencia favorable si el inspector ha constatado que existe dicho acoso, por lo que puede ser altamente conveniente. No obstante, no en todos los casos se prefiere seguir este paso”.
¿Qué es lo que se puede ganar en una demanda de esta índole?
Al realizar una demanda por acoso laboral, el solicitante puede pedir alguno de los siguientes efectos en caso de obtener un resultado favorable:
- La extinción del contrato de trabajo pero percibiendo la misma indemnización que la señalada para los casos de despido improcedente.
- El traslado.
- Una indemnización diferente a la señalada para despido improcedente por daños y perjuicios.
Por otra parte, hay que tener en cuenta que en el artículo 173.1 del Código Penal, se encuentra tipificado el delito de acoso laboral. Este puede conllevar hasta 2 años de prisión. No obstante, es la vía que se sigue en los casos que se consideran de mayor gravedad, donde el nivel de acoso lleva a que la salud de la persona trabajadora afectada se vea mermada por esa situación.
Lo que sostiene el artículo 173.1 del Código Penal es:
“1. El que infligiera a otra persona un trato degradante, menoscabando gravemente su integridad moral, será castigado con la pena de prisión de seis meses a dos años.
Con la misma pena serán castigados los que, en el ámbito de cualquier relación laboral o funcionarial y prevaliéndose de su relación de superioridad, realicen contra otro de forma reiterada actos hostiles o humillantes que, sin llegar a constituir trato degradante, supongan grave acoso contra la víctima”.
Por lo anterior, generalmente las medidas que tienden a tomarse en caso de ganar un juicio por acoso laboral son las primeras, pudiendo ir desde el traslado a la indemnización en distintos niveles, de acuerdo a lo solicitado. No obstante, será necesario obtener las pruebas mencionadas, teniendo un rol muy importante los testigos en caso de lograr que los compañeros de trabajo o quien corresponda se presente a declarar.