Los procesos legales relacionados con las herencias suelen ser algunos de los más complejos, puesto que a estos hay que añadirles el dolor del duelo y la necesidad de repartir distintos bienes legales. Aunque generalmente también se puede comprender este acto como una situación en la cual vamos a recibir activos y riqueza, es importante entender bien nuestros derechos, cómo se lleva a cabo la distribución de estos activos y cómo podemos disfrutar de cada uno de ellos.
A la hora de hablar de las herencias, uno de los temas principales es el que se relaciona con los usufructos. Este concepto legal suele generar bastantes dudas, sobre todo en aquellas personas que acaban de heredar un bien, puesto que podemos plantearnos qué implicaciones tiene un usufructo, cuáles son las obligaciones asociadas y cómo se puede perder el derecho a un usufructo, entre otras cuestiones.
A continuación, te planteamos, por lo tanto, una guía para comprender qué es el usufructo de una herencia. A lo largo del artículo vamos a desglosar los tipos de usufructos y a entender cómo se aplica cada uno en distintas situaciones. Lo que resultará será una visión clara de esta competencia, de modo que entiendas cómo liquidar una herencia con usufructo, cuáles son los derechos de uso y de disfrute de estos bienes heredados y qué es la nuda propiedad.
¿Qué es el usufructo de una herencia?
Uno de los temas principales que relacionamos con las herencias es el de las viviendas, para las cuales nos encontramos con el término usufructo. El derecho de usufructo conlleva unos ejercicios concretos para los herederos más adelante. A la hora de decir que en una herencia se deja en usufructo, hacemos referencia al uso y disfrute de un bien, en este caso una vivienda por parte del heredero. Sin embargo, pese a que decimos que una persona que hereda una vivienda en usufructo puede vivir en ella, no se convierte en su propietario.
Por lo tanto, esta persona podrá disfrutar de la vivienda, pero en ningún momento podrá venderla a un tercero, ya que no le pertenece en propiedad. De esta manera, el heredero percibirá los frutos de las rentas que genere esta propiedad y, de la misma forma, el usufructuario también está en su derecho de alquilar la vivienda, pero no podrá venderla. Al igual que a este heredero se le concede el derecho de vivir y disfrutar de la vivienda, este también tiene ciertas obligaciones.
De este modo, entendemos un usufructo como la situación en la cual una persona hereda un bien mediante una herencia y, aunque no posee derechos legales, sí que tiene el derecho de la libertad de uso de este bien. Asimismo, podríamos definir el usufructo como el derecho de disfrutar también de las rentas que se perciban de este a cambio de conservarlo adecuadamente. Podemos decir que el usufructo es una situación bastante habitual en las herencias familiares o de parejas en las cuales uno de ambos fallece.
Tipos de usufructo en herencia
En la actualidad, en España, conforme a lo que indica la legislación, existen distintos tipos de usufructos de una herencia. Generalmente, para diferenciarlos, tendremos que atender al carácter, a las condiciones estipuladas en la herencia y a la duración de los usufructos, por lo que encontramos los siguientes:
Usufructo Vitalicio
Como el propio nombre indica, en este tipo de usufructo el heredero puede llegar a disfrutar de los bienes y de las rentas durante toda su vida y hasta su propio fallecimiento. Después del fallecimiento de este heredero, se extinguiría el usufructo y la propiedad pasaría al nudo propietario o lo que es lo mismo al heredero original.
Usufructo Temporal
Como su propio nombre indica, aquí suele existir una duración temporal, aunque también puede ser fija. En este caso seguramente se establezca en el testamento la duración de este usufructo, como por ejemplo cinco o quince años. Al expirar el plazo de dicho usufructo, el heredero ya no gozaría de los bienes y, por lo tanto, no podría ni usar ni disfrutar de la propiedad, la cual se transferiría de nuevo al nudo propietario.
Usufructo Universal
En este caso, lo que sucede es que el usufructuario sí que tiene derecho total sobre el uso y el disfrute de los bienes que han sido heredados. Suele relacionarse, generalmente, a herencias entre parejas en las cuales encontramos testamentos que se escriben de uno al otro. Así, el propósito de este tipo de usufructo es sobre todo que uno de los dos cónyuges siga manteniendo el mismo nivel de vida que cuando la pareja estaba completa.
Usufructo Legal y Voluntario
Aquí se suele llevar a cabo un proceso de usufructo mandatario pero bajo distintas condiciones. También se asocia en muchas ocasiones con los cónyuges sobrevivientes. En este caso, además, también se suele establecer dicho usufructo a través de un testamento o de un acuerdo legal específico.
Usufructo Parcial o Restringido
Como el nombre indica, puede aplicarse el usufructo únicamente a ciertos activos dentro de una herencia. A lo que nos referimos es que, en algunas ocasiones, por ejemplo, un usufructuario gozará del derecho a vivir en una vivienda, pero, sin embargo, no podrá acceder a sus cuentas bancarias o a estas tierras. Es una buena estrategia para que pueda suceder una distribución de activos más versátiles
Usufructo de bienes y derechos
En ocasiones en las que se utiliza un usufructo de bienes y derechos, decimos que el heredero tendrá derecho a disfrutar de distintos objetos consumibles o los cuales generen cierta renta. Por ello, el usufructuario en este caso adquiriría los beneficios y las utilidades de este derecho heredado.
Usufructo de Usufructo
Como última opción, y no uno de los casos más comunes, sucede este otro supuesto en el cual se le puede ofrecer a alguien el usufructo de un usufructo. Un ejemplo sería un testamento de pareja en el cual se le permite al cónyuge que goce del usufructo de sus bienes durante su vida, aunque quizás tras su fallecimiento este puede pasar a otro heredero diferente, como a sus hijos.
¿Qué es usufructuario?
Aunque a lo largo del artículo ya hemos estado comentando distintos aspectos relacionados con el usufructuario, todavía puede ser que quede alguna duda respecto a esta figura. Desde DudasCaseras.com, una web especializada en consultas y respuestas sobre vivienda, quieren darnos las claves para comprender este concepto al detalle. Y es que ya sabemos que el usufructo de un inmueble lleva a un heredero a disfrutar de ciertos derechos asociados a este, por lo que podemos determinar quién es el usufructuario de una herencia.
De esta forma, el usufructuario se considera la persona que goza del derecho de usar y de disfrutar de un bien, que en la mayoría de los casos suele asociarse a una propiedad. Aun así, esta persona no tiene la propiedad de este bien, sino que puede disfrutar de ella, recibe los ingresos de esta propiedad y vivir en la vivienda, pero no se considera su propietario legal a ojos de la ley. De esta manera, sabemos que el usufructuario disfruta de este bien de una forma temporal y por ello tiene sus derechos y deberes.
Si surge la pregunta de cuándo se deja de ser usufructuario, tenemos que atender a lo que se especifica en el artículo 513 del Código Civil. Este dice que un usufructo se extingue siempre por la muerte del usufructuario, por expirar el plazo o por cumplirse la condición resolutoria cuando el usufructo y la propiedad se reúnen en una misma persona. También si se renuncia a estos usuarios, al prescribir, al suceder una resolución del derecho del constituyente o por la pérdida del objeto del usufructo.
Obligaciones del usufructuario
Como bien hemos comentado en el apartado anterior, existen derechos y deberes del usufructuario que este usufructuario debe cumplir si quiere gozar de dicha herencia. En cierta manera, existen unos derechos y deberes específicos asociados con lo que establece el marco legal, pero también se tendrá que atender a los que estipule el propio contrato de la herencia. Por ello, en los casos en los que no se marca ningún tipo de obligación directamente, se tendrán que acatar las indicaciones que aparecen en el Código Civil en el apartado 470.
De esta forma, si hablamos de los derechos de los usufructuarios serían los siguientes:
- Disponer del objeto sobre el cual se goza del usufructo.
- Percibir los frutos de este objeto o propiedad.
- Realizar todo tipo de mejoras sobre el bien heredado.
Por otro lado, si atendemos a cuáles son las obligaciones del usufructuario por ley, hablamos de las consignas siguientes:
- Conservar en buen estado el objeto usufructuado.
- Llevar a cabo las reparaciones ordinarias que requieran este bien usufructuado y hacerse cargo de los gastos asociados.
- En el caso de que se tengan que llevar a cabo reparaciones extraordinarias, se tendrá que anunciar siempre esta acción al dueño y heredero real de dicha propiedad o bien.
- Informar sobre cualquier problema que pueda surgir con el derecho de propiedad.
- Estar al día en el ámbito contributivo y, por lo tanto, abonar las cargas y contribuciones necesarias.
- Pagar cualquier gasto relacionado con pleitos que puedan surgir sobre este usufructo.
- Entregarle al nudo propietario la cosa usufructuada llegado el momento del relevo.
¿Se puede perder el derecho a usufructo?
Más allá de toda la información que hemos comentado respecto a cómo funciona un usufructo en herencia, otro de los aspectos más esenciales es el que se relaciona con la finalización de dicho contrato. No es lo mismo que el usufructo se cancele, que simplemente se extinga llegado el momento. Por ello, ya hemos mencionado en el apartado anterior que un usufructo vitalicio puede extinguirse de forma automática con el fallecimiento del usufructuario.
Sin embargo, sí que existe la posibilidad de perder el derecho a usufructo, dependiendo de diversas circunstancias. A continuación, exponemos las causas más comunes por las que se puede perder el derecho usufructo:
- El término del usufructo puede suceder, sobre todo, si en el documento de la herencia se ha establecido un plazo específico para el uso de este usufructo. Al terminar este derecho, el usufructo simplemente finalizará de forma automática y, por lo tanto, el derecho del usufructuario ya no existiría.
- Si se lleva a cabo un incumplimiento de las condiciones por parte del usufructuario, también puede verse terminado el usufructo. Por ejemplo, en el caso de que el usufructuario no mantenga en buenas condiciones el bien que ha sido cedido o lo dañe intencionalmente, el propietario o el heredero podría terminar este contrato.
- Otra forma de perder el derecho de usufructo puede ser simplemente la propia renuncia del usufructuario. Esto debe ser siempre de manera voluntaria.
- En los casos en los que se llegue a un acuerdo entre varias partes involucradas, generalmente el usufructuario y el propietario, también puede acordarse este fin al usufructo. Hablamos de un trámite que debe contemplarse bajo la ley y dejarse siempre por escrito.
- Finalmente, la otra forma de perder el usufructo se asocia con una expropiación legal. Esto suele ser bastante raro, ya que debe ser una autoridad gubernamental la que decida expropiar esté bien legal por motivos varios.
¿Cómo liquidar una herencia con usufructo?
Teniendo claro todo lo que hemos comentado en los apartados anteriores, nos queda hablar de otro de los procesos más importantes: la liquidación de la herencia con usufructo. Este proceso se lleva a cabo mediante los pasos que mencionamos a continuación:
- Primeramente, se reunirá toda la documentación y la copia del testamento para poder proceder a repartir los bienes.
- A continuación se identificará a los beneficiarios y herederos legales.
- Valorados los bienes, se procederá a liquidar las deudas pendientes del fallecido.
- Lo siguiente será establecer el usufructo y realizar la partición correspondiente de los bienes de la herencia.
- Hecho esto, se valorarán los derechos del usufructuario y de los nuda propiedad y se llevará a un acuerdo entre las partes sobre el uso y la distribución de estos bienes.
- Todo esto se plasmará en una escritura pública para poder a continuación declarar a los herederos y pagar los impuestos de sucesión, de modo que se pueda llevar a cabo el registro en la propiedad y actualizar la información correspondiente.
¿Qué es la nuda propiedad en una herencia?
Para finalizar este artículo, tenemos que hablar de otro término que hemos utilizado en diversas ocasiones: nuda propiedad. En este caso, se trata de lo opuesto al usufructuario, es decir, la persona que se considera propietaria de un bien o de una propiedad, pero que no puede hacer uso de ella. En este caso, la posesión y el disfrute de este bien está en manos del tercero, que sería el usufructuario. Una vez finaliza el derecho de usufructo del usufructuario, el bien que este ha disfrutado pasaría directamente a la nuda propiedad.